Unos 130 presos tomaron el lunes a cuatro policías de rehenes en una comisaría de Caracas, reportaron medios locales, para exigir su traslado a otros centros de reclusión asegurando que viven en condiciones de hacinamiento.
Según varios periódicos y radios del país, los reos exigían que se agilice su traslado a diferentes cárceles porque se encuentran repartidos en apenas cinco calabozos de una comisaría en el este de Caracas.
Entrada la noche, diversos medios reportaron la liberación de los efectivos policiales. Reuters no pudo contactar inmediatamente a la Policía Nacional Bolivariana (PNB) para confirmar la información.
“Nuestros parientes están presos en condiciones deprimentes”, dijo Yenny Álvarez, portavoz de los presos, citada por el diario de tendencia opositora El Nacional.
“Mi familiar tiene cinco meses aquí esperando traslado. Él está enfermo. Ellos tienen amebiasis, tienen sarna. Eso es un sótano con humedad”, agregó en referencia a los calabozos de la comisaría.
Reuters no pudo contactar inmediatamente a la Policía Nacional Bolivariana (PNB) para confirmar la información.
Los motines y riñas en cárceles venezolanas son frecuentes.
A principios del 2013, en uno de los hechos más sangrientos, al menos 58 reos murieron y más de 100 resultaron heridos tras un enfrentamiento en la prisión de Uribana, al oeste del país.
Y a fines de año, en la misma cárcel, unos 48 reos fallecieron intoxicados en un confuso incidente. [nL1N0TV1BZ]
Casi 50.000 reclusos se reparten en una treintena de cárceles construidas para menos de un tercio de la población penitenciaria actual, según grupos locales de derechos humanos.
Reuters