ALTO
¿UNO POR UNO?:
Leyendo a través de un “vpn” para saltarme la barrera de acceso que el inefable -y mentiroso ante la ONU en Ginebra- director de Conatel, William Castillo Bolle, colocó a la pagina web de NTN24 de Colombia pude comprobar que hasta el momento, entre 2014 y 2015, han trascendido a la luz pública 42 asesinatos de escoltas de altos funcionarios del gobierno rojo rojito. Aclarando dicha página que poder dar con la estadística oficial es imposible debido al férreo cerco informativo del gobierno venezolano en materia de inseguridad. Sin embargo, el equipo de investigación de NTN24 Venezuela (junto a otros portales de investigación que han venido realizando la misma pesquisa) recabó todos los sucesos entre enero de 2014 y junio de 2015 que tuvieron como resultado la muerte de un guardaespaldas. El servicio de seguridad personal en Venezuela está en boga, debido a los altos niveles delictivos y el alarmante registro de impunidad, que según el Índice Global de Impunidad, en 2012 fue de 90%. A partir de entonces la estadística está vacía ya que “Venezuela no aporta suficientes datos para calcularla”. En el mes de junio resultaron muertos seis escoltas, de los cuales cuatro eran de funcionarios del estado. Podríamos añadirle las muertes de policías en todo el país que solo en este año pasan de 211, la última cifra obtenida en abril. Lo que quiero compartir con Ustedes es muy grave. Parece ser que se robaron del archivo oficial respectivo del Ministerio del Interior, Justicia y Paz (?) el listado oficial de los escoltas permisados para altos funcionarios del gobierno y de algunos “enchufados amigos”. Allí estarían sus datos personales, direcciones de trabajo y de habitación además del tipo y modelo del arma autorizada. Con este hallazgo, que fue hace unos meses pero se mantiene en secreto, hay el temor que los delincuentes que ya controlan varias “zonas de paz” o los que desde las “ejemplarizantes y modelicas cárceles venezolanas” (así tuvieron el tupé de catalogarlas los rojos burócratas viajeros en Ginebra) dirigen bandas de sicarios, secuestradores o ladrones, en actividades en horario 24/7, estén a la caza de los escoltas y su armamento. Sorprende que algunas de las víctimas hayan sido localizadas saliendo o entrando a sus viviendas o en sitios donde habitualmente comen, lo que indicaría un seguimiento previo para estudiarles sus movimientos rutinarios. ¿Dará la cara alguien? ¿Cómo sabe un escolta que no está en esa lista?. Terrible…
MEDIO
¿DOBLAN LAS CAMPANAS?
Es tiempo de reportar lo que por variados mecanismos el actual gobierno busca -y lastimosamente muchas veces logra- que no se sepa. Para esta época del año, las principales encuestadoras del país de nuevo han concluido y entregado a sus clientes sus informes correspondientes al primer semestre del 2015. Algunas de ellas al propio gobierno. La mayoría de estas empresas investigadoras son serias, consolidadas, prestigiosas, con mercados y clientes más allá de nuestras fronteras nacionales.