Paparoni: La existencia de celulares y computadoras en las cárceles facilitan a los presos organizar crímenes

Paparoni: La existencia de celulares y computadoras en las cárceles facilitan a los presos organizar crímenes

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El diputado a la Asamblea Nacional Carlos Paparoni, miembro de la Comisión Permanente de Cultos y Régimen Penitenciario, participó en el debate de Ley de Limitación de la Telefonía Celular y la Internet en el Interior de los Establecimiento Penitenciarios, donde aseguró que está normativa busca eliminar los delitos que se cometen desde la cárcel, debilitando las bandas desecuestro y sibarita que tienen miembros en las cárceles.

Nota de prensa

Paparoni aseguró que la ley tiene por objeto prevenir que desde el interior de los establecimientos penitenciarios del país, se ejecuten delitos a través de la utilización de telefonía celular, internet y en general, de
todos los servicios de voz y datos que ofrecen las compañías de telecomunicaciones. “La existencia de celulares y otras herramientas digitales, como computadoras, facilitan a los presos organizar crímenes desde sus centros de reclusión, sin la necesidad de estar en la calle. Para nadie es un secreto que los privados de libertad emplean teléfonos celulares dependientes del internet para realizar extorsiones, secuestros, sicariatos, operaciones de narcotrá?co, entre otros delitos graves”, aseveró.

En ese sentido, resaltó que si bien es cierto que el Código Orgánico Penitenciario, de reciente aprobación, establece en su artículo 107 que “está prohibido cualquier tipo de equipo, artefacto o sistema de comunicación telefónica dentro de las instalaciones penitenciarias distintas a las previstas en este código, no es menos cierto que la custodia interna y externa de los recintos carcelarios ha sido poco e?ciente en impedir el ingreso de los elementos tecnológicos empleados por los reclusos para la utilización de la telefonía celular dentro de las cárceles y penitenciarias del país”.

Ante ello, el parlamentario por Primero Justicia, explicó que la vigencia de esta ley no supone la supresión del derecho a la comunicación externa de los reclusos, prevista en el artículo 37 de las reglas mínimas para el Tratamiento de los Privados de Libertad de la Organización de las Naciones Unidas  (ONU). “Las cárceles en el país deben ser recintos con las condiciones idóneas para facilitar la
rehabilitación de los privados de libertad, para que se puedan reinsertar en la sociedad”, dijo.

Situación Dramática dentro de las Cárceles.
El diputado Carlos Paparoni informó que desde la creación del Ministerio para los Servicios Penitenciarioa el 26 de julio de 2011 hasta el 30 de junio de 2014 han muerto 1.463 personas y otras 2.259 han resultado heridas dentro de los centros de privación de libertad, según el Observatorio Venezolanos de Prisiones.

Para el parlamentario es necesario oír las diferentes propuestas de todos los sectores, para generar un impacto positivo sobre la percepción de seguridad por parte de la población y una incidencia directa sobre la población carcelaria, “por ejemplo, nosotros proponemos que se inicie con la aplicación de la Ley Desarme para lograr el desarme de la población. Es necesario también la aplicación de un Programa de reparación y construcción de cárceles y la creación de un instituto con carácter técnico que genere políticas penitenciarias hacia las regiones, que supervise las gestiones de los gobiernos regionales en cuanto al cumplimiento de los estándares internacionales y que además, coordine la atención postpenitenciaria integrando al sector público y privado, Organizaciones No Gubernamentales  (ONG’s), iglesia y otros actores sociales. Es necesario incorporar profesionales con credenciales universitarias y experticia en lo que tiene que
ver con la administración y dirección de los recintos carcelarios. Y por supuesto, Incrementar el presupuesto de alimentación y atención médica”.

Finalmente, el diputado a la Asamblea Nacional Carlos Paparoni resaltó la necesidad diseñar y ejecutar planes para la atención integral en cumplimiento de los derechos a la educación, trabajo, recreación, cultura y deporte. Asi como la conformación de Comités de Derechos Humanos para la Paz en cada penal.

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