Siguen las colas para abastecer los carros de combustible en San Cristóbal

Siguen las colas para abastecer los carros de combustible en San Cristóbal

(foto  Tulia Buriticá)
(foto Tulia Buriticá)

Otro día de colas para abastecer los carros de combustible, hicieron usuarios de San Cristóbal y de diferentes municipios del estado Táchira, que vienen a la capital a comprar el carburante, como el taxista Daniel, quien dijo que venía de El Piñal y aprovechó para hacer la cola en la estación de servicio Los Agustinos, cuya fila llegaba al barrio El Lobo. Así lo reseña lanacionweb.com / Marina Sandoval Villamizar

— Tengo una hora haciendo cola, y me parece que la situación es grave porque uno tiene que perder mucho tiempo para echar gasolina –dijo el taxista-, quien no quiso opinar más, con excepción de que comentó que vino a San Cristóbal a hacer una carrera.

Mientras tanto, en un recorrido por las avenidas España y Los Agustinos, se vio que donde había combustible las colas eran considerables e incluso había congestionamiento en los alrededores de las estaciones de servicio, como sucedió en la que está frente a la panadería Gran Avenida, donde prácticamente los carros quedaban parados varios minutos, y era difícil el tránsito desde la redoma conocida como “Batidos el tigre”, cerca del mediodía.
Las bombas Machirí y Paramillo estaban cerradas y no hubo bombero o islero que informara cuándo fue la última vez que llegó la gandola cargada.





En la de Los Agustinos el bombero informó que la gandola llegó a las siete de la mañana.

— Dentro de una hora llega la otra, no sé por qué hay cola, esa respuesta la puede dar el señor gobernador, porque nosotros no manejamos la cantidad de gandolas que mandan ni nada; esta trabaja veinticuatro horas, hoy nos llegan dos gandolas, el resto de la semana, una sola, y la que llegó esta mañana alcanza como hasta las cuatro de la tarde, la que llega más tarde es para trabajar en la noche, mañana amanecemos sin gasolina otra vez, no sabemos a qué hora llega la gandola mañana –agregó.

En la Lago España, en la avenida del mismo nombre, colocaron un lazo en la entrada. La señora María quedó a pocos centímetros de lograr que le llenaran su tanque de gasolina.

— La acabaron de cerrar, porque hay que esperar como una hora a que descarguen la gandola, Dios, ya estoy cansada de esto, tengo como media hora haciendo cola, estaba en la Farmauno, pero ¿qué será lo que pasa con la gasolina?, antes eran los colombianos, ¿ahora quién? Si la frontera está cerrada y no se ve el combustible, entonces es que se “van” las gandolas por los caminos verdes –dijo-.

En la bomba de la Unidad Vecinal había doble cola, porque una da la vuelta para echar combustible por la avenida Principal de Las Flores, y la otra, por los predios de la Unidad Vecinal; una daba a la avenida Lucio Oquendo y la otra llegaba al templo parroquial.

Un bombero gritó: estamos esperando las cien gandolas que mandan para el Táchira, pero para acá no llegan.
Otro islero comentó que la última gandola les llegó el miércoles, a las cinco de la tarde. “Y hay gasolina hasta ahorita, hasta las diez y media, porque tenemos el cálculo, uno va midiendo y viendo, porque los tanques no pueden quedar vacíos. El gobernador dice que vienen más gandolas, pero aquí nunca llega nada, pregúntele a ese señor, que se comió dos horas de cola”.

El usuario era Gerardo Velasco, conductor de carro particular. “La cola en la bomba es mucha, llega uno y ya se ha acabado la gasolina, hoy vine directamente para acá y eché media hora en la cola, pero ayer la hice en dos bombas, la que está frente a La Nación y en la del barrio El Carmen, y no pude surtir porque se acabó el combustible; el gobernador dijo que vienen más de cien gandolas, pero es el discurso de siempre, y no adelanta nada, esta cola llegó hasta la Lucio Oquendo” –señaló-.

En cuanto a la cantidad de combustible que le echan a cada carro, un bombero explicó que dependía de la cantidad de cupos. “Unos tienen 44 litros, otros cincuenta y dos, depende del tipo de carro, hay gente que viene con los tanques vacíos, como hay gente que no necesita mucho, por ahí veinte litros”.

Francisco Becerra también esperaba en ese centro de abastecimiento de combustible. “Tengo como una hora en la cola, vengo desde la avenida (Lucio Oquendo), el gobernador dice que vienen muchas gandolas, pero ya no sabemos ni qué pensar, porque esto lo arregla un gobierno responsable, que valore a la gente y supervise, como hacen las empresas privadas, a Pdvsa, que es la que produce los hidrocarburos, para que haya producción”.

Fedecámaras: si llegara tantacantidad no habrían colas

Por su parte, Daniel Aguilar, presidente de Fedecámaras Táchira, opinó sobre el tema del combustible.

— Se está diciendo que está llegando tanta cantidad de gandolas de gasolina al Táchira, si estuviesen llegando y vendiendo al pueblo tachirense, no habría tantas colas, no están llegando las gandolas que se están prometiendo, al pueblo hay que decirle la verdad, y hay que cerrar las trochas por las que se está yendo una cantidad de gandolas; lo que está sucediendo es que se cierran los puentes para el comercio normal y el tránsito de personas, y por otros caminos se están yendo las cosas, esto no debe suceder, porque esos caminos están custodiados por autoridades venezolanas y colombianas, y eso no es culpa del pueblo ni de los empresarios–.