En Venezuela en mi opinión no han existido buenos y malos gobiernos, sí por el resultado de su gestión de la economía debemos valorarlo; así como en el caso privado se dice que un gerente es bueno o malo de acuerdo a los resultados de la empresa, valorando el resultado de su gestión. En la administración pública, es decir en cargos como Presidente, Gobernadores, Alcaldes. El impacto de la gestión del Administrador -delegado mediante el voto- se verá reflejada en el resultado de la economía, desarrollo, crecimiento y estado de la calidad de vida de los ciudadanos, ya sea Alcaldía, Gobernación o Presidencia de la República. Es decir una buena y adecuada gestión dará resultados óptimos, y una mala pues hará evidente el deterioro.
En Venezuela en teoría el petróleo es de todos los venezolanos, pero como es algo extraño que sea de todos y que podamos disponer libremente de ello, pues el Estado actuando en nombre de los ciudadanos y “por su bien”, asume la administración, pero como el Estado no es una persona en sí mismo, sino que está vinculado directamente a las circunstancias del gobierno, y el gobierno a su vez del partido ganador, pues en resumidas cuentas el petróleo, su uso disposición y beneficios terminan siendo dominio del partido político de turno. De aquí las ganas de gobernar de los políticos y por otro lado las exigencias de los ciudadanos a que el Estado les resuelva la vida, pues… en teoría administra su riqueza.
Ahora bien y volviendo al punto de la gestión del gobierno; ¿Qué pasaría si no existiera petróleo y el gobierno se viera obligado a desempeñar una buena gestión de la economía?, pues sus ingresos provendrían de los impuestos que se originan en la actividad privada de la economía, así que procuraría una mejor economía para tener entonces una mejor recaudación. Y sí algún gobernante no es plenamente eficiente y efectivo en la administración, pues los ciudadanos no lo votaran en las siguientes elecciones, digamos que así debería funcionar la democracia.
Resulta que hay un país en el mundo donde esto no es así; En Venezuela, desde la estatización del petróleo (1975) y apoderamiento de sus recursos por parte de los gobiernos de turno, ninguno de ellos ha procurado que la economía vaya bien, y menos aún han hecho esfuerzo para ello. Es así como casi desde el 58 en adelante con la Democracia Socialista o Social Democracia (IV República) no hubo una administración verdaderamente efectiva, lo que hubo fue gobiernos con buenos precios del petróleo (altos precios) y gobiernos con malos precios del petróleo (bajos precios). Entonces la economía iba bien no gracias a la administración, sino a algo que no dependía directamente del gobierno. A pesar de que la administración fuera mala, el flujo de ingresos era positivo y altamente elevado, permitiendo financiar una pésima gestión, alto volumen de gasto publico y ser popular. Podían tapar los errores con recursos que han caído del cielo. Es así como hemos tenido Presidentes buenos en su primer gobierno y malos en su segundo gobierno ¿Casualidad?, No!, Tenemos a Rafael Caldera I 1969-1974 (buenos precios, buen gobierno) vs Rafael Caldera II 1994-1999 (malos precios, mal gobierno), Carlos Andrés I 1974-1979, (buenos precios, buen gobierno) vs Carlos Andrés Pérez II 1989-1993 (malos precios, mal gobierno) y recientemente a Hugo Chávez I 1999-2013 (-Magníficos- buenos precios, buen gobierno) vs Hugo Chávez y su heredero -Nicolás Maduro- 2013-2016 (malos precios, mal gobierno -pésimo-).
Solo por citar tres gestiones importantes, dos representativas de la IV República y sus partidos COPEI y AD y los que han mandado en la V República el PSUV.
El modelo no ha cambiado, los errores en materia política y económica de la IV República no es que hayan sido menos, sino que el deterioro del país fue más lento, pero constante, y se suma a ello la solidez en materia de economía y desarrollo que el país tenía previo a la IV República, quizás si el país estuviera en mala situación habría sido más rápido. A lo largo de 40 años, el deterioro fue gradual pero evidente y la queja social pario al nuevo socialismo, que equivocadamente acusaba al viejo y declarado socialismo, como gobiernos de derecha. El nuevo socialismo instaurado es pues hijo de aquellos padres – AD y COPEI, engendrado en la IV República; todos los males, vicios, errores e inmoralidad juntos en un solo gobierno. El precio alto del petróleo mantuvo a flote una vez más y por desgracia de los venezolanos a un gobierno que ha cometido las peores atrocidades y errores en lo económico, político, institucional, jurídico y moral. 17 años han sido pocos para la destrucción moral y material, se destruido todo bajo el amparo de los precios altos, pero al bajar la marea, la destrucción quedo a la luz, nada que sorprender para quienes conocíamos el destino de un gobierno como ese, la culpa le toco a otro – Nicolás-, que se encargó de cosechar lo que con Chávez se sembró, y por fortuna el Don está muerto porque aún hoy y en la crisis que vive Venezuela, bajo la retórica sorprendente y el discurso político de este hombre, algunos de sus seguidores estarían comiendo tierra y estarían felices porque el comandante dice que la tierra es comida.
A lo largo de la historia reciente de Venezuela no se puede decir que han existido buenos y malos gobiernos, siendo objetivos, solo han existido gobiernos con buenos precios del petróleo y gobiernos con malos precios.
Me despido no queriendo ser pesimista sino realista, critico aunque la verdad no guste a todos.