Juan José Moreno: Los “care´ popsicle” del régimen y su arte de montar ollas   

Juan José Moreno: Los “care´ popsicle” del régimen y su arte de montar ollas   

thumbnailjuanjosemorenoCuentan personas que recuerdan anécdotas relacionadas con el extinto ex presidente Rafael Caldera, que en un momento de su primer gobierno (1969-1974) comparó jocosamente al entonces dirigente nacional de Acción Democrática, Octavio Lepage, con un famoso actor humorístico  de Hollywood a quien por la seriedad en el rostro con las que expresaba sus más insólitas y hasta cómicas afirmaciones llamaban “care´popsicle”. La palabra popscicle resulta realmente de una traducción del inglés de lo que en Venezuela conocemos simplemente como el tradicional “helado de palito”. Suponemos entonces que el cultísimo mandatario se refería a la expresión fría y dura del personaje del cine para soltar sus increíbles barbaridades.

Esta referencia viene al caso, al tratar de definir la actitud de ciertos representantes de alto rango del régimen que, con su cara más “lavada” expresan ideas y emiten declaraciones que nos sabemos si nos causan risa o desprecio, por lo ridículo y maquiavélicos contenidos de sus mensajes. En este caso, nos referimos al tristemente célebre Elías Jaua, quien en sus presentaciones ante medios de comunicación social destaca por el cinismo de sus afirmaciones. Su más reciente entrevista, en Vladimir a la 1, es un verdadero “poema”, un monumento al “caradurismo” más digno del famoso care´popsicle norteamericano.

Al igual que sus cínicos camaradas, lo vimos repetir con cara de serio la misma mentira de la imposibilidad del referendo este mismo año, por presunta demora de la oposición para presentar la solicitud al CNE. Como todos ellos, no habla ninguno de la tardanza de las “cuatro comadres” para emitir los formatos de planillas para dar inicio al proceso, ni de las trampas del organismo sometido a la voluntad de Maduro y a la influencia de Jorge Rodríguez sobre doña Tiby, para alargar los lapsos que impidan la expresión de voluntad de referendo y revocatorio para el año en curso como está harto demostrado aspira la mayoría de los venezolanos. Jaua también  maneja los discursitos demagógicos de Maduro y Diosdado, y del resto de “care´poscicles”  que todos conocemos y del que forma parte, en relación con el fulano diálogo. ¿Quién a estas alturas se come el cuento de la presunta sinceridad del diálogo? Pensamos que solo quienes se siguen comiendo y repitiendo el cuentico de la guerra económica, lo siguen cacareando. También le sacan el cuerpo a hablar sobre elecciones regionales, con la misma “cara lavada”





Pero tan grave como todo lo anterior, es el caradurismo compartido por todo el grupete, con el agravante de la incorporación de oficiales de las fuerzas armadas, a todos los niveles, que con similar expresión gestual, corporal y oral repiten la olla del golpe de Estado presuntamente móvil. Realmente resulta preocupante y por demás lamentable, que funcionarios de la institución castrense, llamada por la carta fundamental de la nación a constituirse en uno de los pilares fundamentales de la democracia y la institucionalidad del país, copien los malos ejemplos de un gobierno demostradamente manipulador y corrupto, para hablar de una supuesta “derecha golpista”; en esa persistente olla evidentemente cocinada con la intención de distraer a una opinión pública consciente de la penosa situación que afecta a toda la población, así como para justificar la progresiva oleada de persecución y represión contra los sectores de la oposición.

En un auténtico arte malévolo, en correspondencia con esa forma de relacionarse con los venezolanos,  se ha convertido la manipulación durante el actual régimen con una desfachatez jamás conocida en los anales de la historia política del país. Manipulación esta que se evidencia en la versión que ofrecen a la población sobre la manera de interpretar la Constitución de la República, para convertirse el gobierno en una dictadura constitucionalista, según criterio de expertos en el tema.  Tan visible y ridícula, resultan para cualquier persona con un mínimo de capacidad para etender lo que está sucediendo actualmente en el país, están resultando las evidentes ollas en torno a las que presentan como causas para la detención de importantes dirigentes políticos de oposición: legitimación de capitales, posesión de ridículas sumas de dinero presuntamente destinadas a financiar la subversión así como de elementos para la fabricación de explosivos con fines igualmente golpistas, forman parte de esa maraña teatrera con los que los “genios de la revolución” pretendan inútilmente convencernos de que aquí en el país no hay razón para el cambio que se reclama, y que no nos cansaremos de reclamar por la vía institucional y democrática, aunque nos obliguen en vano a salirnos del camino legal escogido.

@JJMorenoA