Justicia electoral arranca con voto dividido el debate sobre la candidatura de Lula

Justicia electoral arranca con voto dividido el debate sobre la candidatura de Lula

Vista del plenario de la Corte Superior Electoral de Brasil, durante el juicio sobre la elegibilidad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso, antes de las elecciones. / AFP PHOTO / EVARISTO SA

 

Uno de los siete jueces de la corte electoral votó el viernes contra la candidatura del encarcelado expresidente Lula y otro por el derecho del favorito a presentarse a las elecciones de octubre, en un debate que puede decidir el destino de Brasil.

La audiencia en la sede del Tribunal Superior Electoral (TSE), en Brasilia, que ya lleva cinco horas, situó por un lado a quienes invocan la ley de “Ficha Limpia”, que impide a un condenado en segunda instancia presentarse a cargos electorales; y por el otro a quienes afirman que un reciente pedido de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU para que el líder de la izquierda pueda hacer campaña tiene carácter vinculante.





“La ley de Ficha Limpia prevé claramente que los condenados por un tribunal colegiado son inelegibles”, afirmó el relator del proceso, Luis Roberto Barroso.

El magistrado alegó además la necesidad de zanjar rápidamente una situación que acentúa las dudas sobre las que se anuncian como las elecciones más inciertas de las últimas décadas, la víspera además del inicio de la difusión de propaganda electoral televisiva.

“En este momento complejo y polarizado, la mejor alternativa es que la justicia electoral esclarezca con celeridad, transparencia y colectivamente el marco definitivo de los candidatos a presidente antes del horario electoral, que puede ser decisivo”, expuso.

El juez superior brasileño de la Corte Electoral Luis Roberto Barroso (arriba) y la procuradora general Raquel Dodge hablaron durante el juicio sobre la elegibilidad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva antes de las elecciones. / AFP PHOTO / EVARISTO SA

 

Barroso rechazó las denuncias de que el exmandatario (2003-2010) estaría sufriendo persecución política y expresó su posición con contundencia: “Voto por la procedencia de las impugnaciones formuladas (..). Deniego el pedido de registro del candidato Luiz Inácio da Silva para la Presidencia de la República”, remató.

El siguiente juez en expresar su parecer, Luiz Eduardo Fachin, concordó con el hecho de que Lula podría ser inhabilitado de acuerdo con la legislación brasileña, pero dijo que se debía acatar la decisión de la Comisión de la ONU y “reconocer el derecho [de Lula] de presentar su candidatura”.

Ese pronunciamiento causó sorpresa, dado que Fachin, a cargo de las investigaciones de corrupción de la operación Lava Jato en la corte suprema, suele estar alineado con los fiscales que desde hace cuatro años consiguieron encerrar o acusar a buena parte de la élite política y empresarial de Brasil.

Lula, de 72 años, purga desde abril en Curitiba (sur) una pena de 12 años y un mes de cárcel por corrupción y lavado de dinero. Fue declarado culpable en julio de 2017 de beneficiarse de un apartamento en un balneario paulista, ofrecido por una constructora para obtener su mediación en contratos con Petrobras. La condena fue ratificada y ampliada en enero de este año por una corte de apelación.

La justicia electoral no discute la cuestión de la liberación de Lula, que corre por otros canales judiciales.

Lula, que enfrenta otros cinco procesos judiciales, se declara inocente en todos y denuncia una persecución mediática y judicial para impedirle volver al poder.

El juez superior brasileño de la Corte Electoral Luis Roberto Barroso (R) habla con la jueza Rosa Weber, presidenta de la Corte, durante el juicio sobre la elegibilidad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva antes de las elecciones. / AFP PHOTO / EVARISTO SA

 

“Violencia judicial”

Los abogados de Lula enviaron al TSE sus alegatos finales, de unas 200 páginas, el jueves a las 23H00, una hora antes del plazo legal.

El PT denunció la celeridad de la inclusión de la corte para tratar el tema.

“El TSE comete otra violencia judicial contra Lula y el pueblo que quiere elegirlo presidente”, afirmó la organización en un comunicado.

Cualquiera sea la decisión de este viernes, la parte perdedora podrá presentar recursos formales ante el propio tribunal electoral o cuestionamientos sobre el carácter constitucional del fallo, ante la corte suprema, explicó a la AFP el magistrado Henrique Neves, un exmiembro del TSE.

En caso de invalidación, el TSE debe decidir también si su fallo entra en vigor en espera del resultado de los recursos.

El exlíder sindical, que al abandonar el poder tenía una popularidad de más del 80%, es identificado por millones de brasileños con años de crecimiento económico y de progreso social.

Su intención de voto no para de crecer, acentuando aún más las incógnitas sobre estos comicios, los más inciertos de las últimas décadas. Una encuesta de Datafolha le atribuyó la semana pasada 39%, 20 puntos más que el ultraderechista Jair Bolsonaro, su más inmediato seguidor. El sondeo indica además que Lula derrotaría a cualquier adversario en una segunda vuelta.

Si su candidatura resulta impugnada, es muy probable que su compañero de fórmula, Fernando Haddad, sea quien lo reemplace.

El presidente del Tribunal Superior Electoral de Brasil, la jueza Rosa Weber, habla durante el juicio sobre la elegibilidad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva antes de las elecciones. / AFP PHOTO / EVARISTO SA

 

Guerra en Twitter

La sesión del TSE generó una pulseada en la red social Twitter.

“Tuitazo AHORA! Vamos a luchar por la candidatura de @LulaOficial a la Presidencia. Participe del tuitazo con el hashtag #LulaNasUrnasTSE”, exhortó la cuenta oficial del PT.

La etiqueta se convirtió en la primera tendencia en Twitter de Brasil y se coló entre lo más comentado a nivel global.

Poco después, el hashtag #LulaInelegivel (Lula inelegible) también comenzó a escalar posiciones y alcanzó el segundo lugar entre lo más tuiteado en Brasil.

AFP