Más de 14 años preso lleva el Comisario del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), Iván Simonovis, quien fue detenido en noviembre de 2004 tras los hechos violentos del 11 de abril de 2002 en Puente Llaguno, Caracas, tras la orden de Hugo Chávez.
Por Lisbeth Piñeros / lapatilla.com
En el año 2014, los abogados de Simonovis lograron una medida humanitaria por su crítica condición de salud y permanece privado de libertad desde su casa, cumpliendo la máxima pena de 30 años.
En noviembre de 2017 le fue colocado un grillete por efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en su tobillo izquierdo y el pasado mes de abril de este año le fue colocado otro más en su tobillo derecho.
El 21 de noviembre de 2018, el Sebin sacó a Simonovis de su vivienda para trasladarlo sin orden judicial -y bajo estrictas medidas de seguridad- hasta la sede en Plaza Venezuela con la excusa de realizarle exámenes médicos que habían sido solicitados por sus abogados defensores.
Su esposa y abogada Bony Pertiñez de Simonovis, ha denunciado en reiteradas oportunidades que el régimen de Maduro es el responsable del ensañamiento contra su esposo, a quien le corresponde medidas alternativas desde 2012.
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