Un hombre tomó fotos sexuales secretas a su esposa inconsciente después de envenenarla con píldoras salió “libre” de la corte.
Por The Sun
Traducción libre por lapatilla.com
Stephen Lee de 51 años, se declaró culpable de drogar a su esposa Candice, colocar una cámara secreta en su habitación y tomar fotos íntimas de su esposa durante 17 años.
Stephen argumentó que le había dado las drogas por su propio bien: escondía en la comida, pastillas para dormir y antidepresivos, luego desnudaba y comenzaba la sesión.
A pesar de su admisión de culpabilidad, Candice se sorprendió cuando su esposo solo recibió una sentencia de prisión suspendida de 16 meses.
Candice de 51 años, ahora está luchando contra el sistema legal para aumentar la sentencia con la esperanza de ayudar a otros que sufren a manos de parejas abusivas.
Convulsiones misteriosas
La ex conductora de vehículos pesados, Candice, conoció al instalador de neumáticos, Stephen, por su trabajo y después de varias citas, decidieron casarse en octubre de 2001.
Siete meses después nació su hija Rhona, pero Candice relató que su matrimonio comenzó a desmoronarse por los cambios de humor que la hacían sentir insegura en su propia casa.
La pareja se separó en 2016, después que Candice le pidió a Stephen una descanso de la relación para descubrir si su matrimonio merecía una segunda oportunidad.
Pero las cosas tomaron un giro siniestro durante el fin de semana de Pascua en 2017, Candice sufrió una convulsión.
“Me había sentido agotada por varios días y mientras conducíamos tuve un ataque en el carro, nunca antes había sufrido de convulsiones”, relató Candice.
“No lo sabía, pero desde ese momento me drogaron todos los fines de semana. Siempre estaba somnoliento y me dormía en la silla y Stephen me llevaba a la cama”, recordó.
Candice descubrió que a menudo su comida tendría un sabor amargo y sospechaba que estaba siendo drogada. Pero sin saber qué medicamento estaban buscando no podían analizarlo argumentó el personal del hospital.
La Investigación
El 16 de septiembre de 2017, después de hablar con una amiga, decidió que no podía continuar así, se fue en la estación de policía en Matlock y denunció sus sospechas.
Los oficiales le creyeron, y le pidieron algunas muestras para analizar. Una prueba de orina reveló que había estado tomando antidepresivos y medicamentos para el insomnio durante meses.
Cuando la policía registró la casa, encontraron la cámara oculta en un altavoz estéreo en la habitación. El dispositivo estaba conectado al celular de Stephen.
Cuando Stephen apareció, encontraron dos paquetes de drogas en su bolsillo. También había paquetes vacíos en los cajones de su habitación. Y encontraron varios retiros bancarios, descubrieron que había estado comprando las drogas en línea y enviándolas a otra dirección.
Cuando la policía examinó el teléfono, se desplegó todo el horror de lo que estaba ocurriendo.
“Entonces me mostraron las fotos. Yo nunca me había tomado una fotos desnuda”, recalcó Candice.
El Horror
“Había un montón de imágenes mías desnudas, no había fotos de nosotros teniendo sexo solo mías desnuda y completamente inconsciente. Nunca había posado para él para ninguna foto sin mi ropa”, explicó Candice.
El 19 de febrero de este año, Stephen Lee salió de la corte de Derby Crown después de recibir una sentencia de prisión de 16 meses, suspendida por dos años.
Candice, sentía que ni era lo suficientemente fuerte como para estar en la corte, aunque descubrió que “Su abogado argumentó que no había evidencia para probar que había sido drogada antes de que se tomaran esas fotos”.
“Pero la declaración de mi hija reveló que vio a su padre llevarme a la cama inconsciente en más de una ocasión”, señaló Candice.
Ahora está presentando una apelación contra lo que ella cree que fue una “sentencia indebidamente leve”.
Ella afirma que su declaración de impacto de la víctima no se leyó completamente en la corte.
Candice dijo: “Esto me ha abierto los ojos sobre el sistema de justicia y que no funciona para las proteger a las víctimas. Una vez que se obtuvo sus declaraciones de culpabilidad, no se molestaron en presionar por una pena para privativa de libertad, lo que me habían asegurado que obtendría”.
“Podrían y deberían haber hecho un ejemplo de él”, concluyó Candice.