José Machillanda: Geopolítica + desobediencia civil

José Machillanda: Geopolítica + desobediencia civil

No queda duda que la crisis política venezolana está presionada por la geopolítica continental impuesta desde la 74ª Asamblea de las Naciones Unidas, y la conducta de participación política contendiente de la ciudadanía democrática que está obligada a ejecutar la desobediencia civil. Los ciudadanos demócratas del país deberán internalizar y comprender la decisión de New York 2019, en la que se define como una real amenaza el régimen castro-madurista y su militarismo ideologizado, con lo cual cobra fundamental importancia la Resistencia Civil a través de la Desobediencia Civil.

El régimen madurista como amenaza en el continente está cercado, bloqueado e impedido de actuar como gobierno, por ello cada vez más acciona como una tiranía arrinconada, sin capacidad ni siquiera de resolver la miseria exponencial que vive Venezuela. El régimen aumenta su vinculación con grupos de violencia guerrillera y subversiva, creciendo su imagen de anti-política y siendo visualizada mayormente en la geopolítica continental como una amenaza mayor.

El madurismo marxista ya no puede disimular el resquebrajamiento de un bloque importante del procaz partido político en armas, que ahora siente como lo cerca la Sociedad Ahuecada y como lo empuja la Calamidad Político Social que sufren los venezolanos. El resquebrajamiento muestra una abierta murmuración a lo interno de las instalaciones del cuerpo armado, crece la desobediencia, se incrementa la deserción y un poco después la huida de filas, que muestra un cuerpo cada días más desestructurado e incapacitado para recibir, ejecutar y recibir órdenes del poder político. Crecen las mafias y los grupos diversos de presión a lo interno de un organización armada con más de 1200 generales que no tienen que hacer.





La amenaza madurismo-militarismo está boqueando. Tiembla y acciona violentamente al saber que no tiene control de una supuesta revolución y menos de la sociedad venezolana, además reconoce que la geopolítica continental, es decir, los Estados del continente y del mundo saben el rol de los hombres uniformados sin mandos, pero con empresas. La geopolítica continental prepara medidas sancionatorias y está consciente que esa tiranía militarista tiene que desalojar el poder. A partir de esta realidad, el ciudadano tiene que crecer en Desobediencia Civil y debe practicarla y ejercerla de manera incremental y permanente, para que se entienda lo importante y critico que es exponenciar la Desobediencia Civil frente a una tiranía.

Desobediencia Civil significa la desobediencia de la mayoría de la población, entendida como parte de una lucha colectiva, basada en la realidad de que todo gobierno depende en última instancia de la cooperación, el sometimiento y obediencia del ciudadano. La desobediencia de los demócratas venezolanos al madurismo es y tiene que ser el MÉTODO DE ACCIÓN COLECTIVA CIUDADANO, para terminar el desplazamiento de la tiranía socialismo y su militarismo obsecuente y cobarde. La desobediencia civil será el método de no colaboración, pero a la vez la expresión de dignidad y valor político del venezolano para terminar con este ensayo desgraciado del castrocomunismo militarizado.

Desobediencia Civil que animará, estimulara y potenciará a las Raíces Sanas, a grupos de presión y sobre todo a un liderazgo político emergente que se ha venido conformando, estudiando, sabiendo, conociendo qué es política y sobretodo el nuevo rostro de la política distinto del partidismo maldito para privilegiar a la ciudadanía democrática. Ciudadanía democrática que ya conoce la realidad geopolítica de Venezuela, una Venezuela que es asiento de la segunda Marquetalia, que está tomada por ejércitos de otros países y que pretende ser dirigida por unos tiranos irracionales, que están llenos de pánico y éste será mayor frente a una Desobediencia Civil colectiva. Desobediencia Civil, que bien estructurada con gran ética, mucho coraje y sobretodo sentido de la política y de la oportunidad permitirá acelerar el cambio.

Desobediencia Civil más geopolítica constituye la estrategia dura del ciudadano, más las raíces sanas, más el liderazgo político emergente que entiende después del cambio político de Bolivia, que los marxismos y los totalitarismos tienen límites y que ese límite en Venezuela deberá ser impuesto por la ciudadanía. El cambio político de Bolivia muestra al continente la importancia de la democracia y obliga a un esfuerzo de Participación Política Contendiente serio y cierto, que tenga como foco la desobediencia civil. Desobediencia Civil dilatada en el tiempo, reforzada por la geopolítica continental para que ambas generen una fuerza que ahogue al bestiario militarista, que ya está boqueando que después de 20 años de engaño y latrocinio, que serán sometidos al juicio de una sociedad democrática y a la presión de un continente que aspira la decencia, crecimiento y desarrollo para los países de América del Sur.