Corto y Picante “Lo tomas o te jodes” Por @FariasJoseLuis

En su obra “La inteligencia fracasada” José Antonio Marina escribe: “Si la inteligencia es nuestra salvación, la estupidez es nuestra gran amenaza”.

El rechazo de Maduro a la propuesta del Departamento de Estado de EE.UU de un “Marco de Transición Democrática para Venezuela” calza perfectamente bien en la segunda parte de la acertada afirmación del notable pensador español.

El vocero del régimen Jorge Arreaza, cuyo aspecto lo ayuda mucho en ese ejercicio, puso de su propia inspiración en su Twitter que “el Gobierno Bolivariano reitera que Venezuela no acepta, ni aceptará jamás tutelaje alguno, de ningún gobierno extranjero”, se sobrentiende que no fue necesario añadir: “los gobiernos de Cuba y Rusia están exceptuados”.





El mismo día de las imputaciones, jueves 26 de marzo, cuando todo parecía que los norteamericanos quemaban las naves para arrasar con Maduro, James Story se ocupó de dejar abierta la puerta de la “negociación”, sin que casi nadie lo advirtiera en medio de aquella excitante marea de alegría y optimismo despertado por las acusaciones.

La aguda periodista de la fuente política Luz Mely Reyes tuvo el acierto de entrevistarlo y el Encargado de Negocios de la Embajada Virtual para Venezuela no descuidó hacer lo que siempre hace todo político, dejar la rendija por donde pueda entrar la luz del entendimiento: “Vamos a seguir dando la presión, para convencer a este régimen para sentarse en la mesa para conseguir una salida. Lo que queremos ver es una negociación entre venezolanos.”

Al día siguiente Juan Guaidó corrió el albur con la propuesta del Gobierno de Emergencia Nacionalque irritó más a los apaciguadores que al propio régimen.

Este martes, 31 de marzo, el veterano Elliott Abrams respaldó el planteamiento de la negociación en un artículo que nos vino con las primeras luces del día.

Para que sobre las 11 de la mañana Mike Pompeo lo oficializara como propuesta por el Departamento de Estado que excitó a muchos y ofendió a pocos.

Como todos sabemos, las propuestas se aceptan o se rechazan y como detrás de las mismas siempre hay un propósito, la actitud que se asuma ante ellas reviste al menos una consecuencia que en este caso parece ser: “la tomas o te jodes”.