Un grupo de entusiastas rusos filmaron un arriesgado truco con la participación de un avión y un Tesla. Aceleraron el vehículo a una velocidad máxima de 245 kilómetros por hora en la pista de aterrizaje de un aeropuerto cerrado y con la ayuda de un piloto intrépido, un exmilitar jubilado, y los cálculos de un estudiante de matemáticas, hicieron que la aeronave volara muy cerca del automóvil eléctrico a la misma velocidad.
“Tesla ft Avión: cuando estás aburrido durante el aislamiento y solo te surgen ideas locas”, escribió en Instagram el autor de la idea, Alisher Punk, quien confesó al portal TJournal que quería acelerar el Tesla para hacer que el avión se colocara sobre él a una distancia de dos metros, aunque “muchos dijeron que era físicamente imposible”.
El peligro principal del truco consistía en la sincronización de las velocidades de la aeronave y el automóvil, ya que la velocidad máxima de Tesla resultó ser prácticamente igual a la más baja posible para el avión de entrenamiento L-29, que se utilizó durante el rodaje. Además, volar a una altitud tan baja también representa una amenaza, ya que el flujo de aire que sale de un avión puede simplemente volcar un automóvil.
El director y productor Serguéi Valiáyev, responsable del rodaje, comentó que la planificación de todo el proceso tomó seis meses y el hecho de que todo saliera bien fue un “milagro” debido al tiempo y presupuesto limitados. Cerca de 30 personas participaron en el proyecto, que le costó a Alisher unos tres millones de rublos (más de 40.000 dólares).
Ahora, el equipo puede enfrentarse a problemas legales porque violaron varias reglas sin haber podido recibir una autorización oficial, y el piloto también puede ser privado de su licencia. Alisher afirma que está listo para las posibles consecuencias y solo quiere que el video del truco llegue hasta el fundador de Tesla, Elon Musk, y que él le proporcione otro modelo de automóvil para hacer más videos.