Ronaldinho tuvo un 2020 para el olvido. Pasó cinco meses detenido en Paraguay por ingresar con documentación falsa y cuando recobró la libertad, se contagió de coronavirus. Con una imagen que parecía romperse en pedazos, “Dinho” se reinventó y hoy luce como un exitoso empresario que no para de ganar millones.
Si bien cualquier persona evitaría pasar un día en la cárcel, la estadía del brasileño no fue un calvario. Mientras estuvo detenido junto con hermano Roberto de Assis Moreira por ingresar con un pasaporte falso, gozó de varios privilegios tras las rejas. Fue así como a Ronaldinho se le permitió el uso de celular y contó con televisión por cable, ventilador y hasta una heladera en su celda. Además, recibió visitas constantemente y jugó algunos picados con los otros presos, a quienes además les mostró sus dotes con en el futvóley.
El astro brasileño se dio el lujo también de disputar un torneo de fútbol en la cárcel y de consagrarse campeón, siendo la máxima figura del equipo con cinco goles y seis asistencias. El premio que ganó fue un lechón de 15 kilos, que compartió con el resto del equipo. Es por eso que pese al mal trago que le significó ese viaje a Asunción para un acto a beneficio de fundación Fraternidad Angelical, que luego sería investigada por evasión fiscal y lavado de dinero, sus 171 días privado de su libertad fueron más llevaderos que el resto de los mortales.
Hasta que llegó la bendita libertad, bajo fianza. Porque Ronaldinho pagó un millón de reales (unos 190 mil dólares) para recuperar su vida. Fue así como el 24 de agosto de 2020, junto a su hermano Roberto de Assis Moreira, Dinho fue beneficiado con la suspensión condicional del procedimiento en la causa por el uso de documentos públicos de contenido falso por la que fueron procesados en Paraguay y tras ser liberados podrán regresar a su país.
El Ministerio Público de Justicia pidió la suspensión condicional del procedimiento para el ex futbolista por un año y esto fue concedido por el magistrado, luego de la detención que se produjo en marzo de 2020. El juez Gustavo Amarilla dictó una condena de dos años de cárcel para Roberto de Assis, pero con la suspensión de la ejecución de la condena por el mismo plazo, y dispuso la donación de 110.000 dólares como reparación al daño social; y, al igual que su hermano, deberán fijar un domicilio en Brasil.
Para el caso de la donación, la Fiscalía pidió suspender la causa de Ronaldinho para que a cambio también done 90.000 dólares a la Universidad Nacional de Asunción (NA) y a la causa Todos Somos Bianca. El juez explicó que el dinero será destinado al Ministerio de Justicia para la lucha contra el coronavirus en la compra de insumos sanitarios y equipos de bioseguridad de guardiacárceles de todo el Paraguay.
Ronaldinho Gaúcho y su hermano Roberto de Assis cumplieron prisión preventiva en la Agrupación Especializada de la Policía Nacional desde el 4 de marzo y desde el 7 de abril estuvieron recluídos en un hotel de Asunción. A cinco meses y 20 días de ser detenidos, quedaron en libertad.
A finales de octubre, otro golpe. Ronaldinho anunció que se contagió de coronavirus pero que se encontraba en buen estado de salud y asintomático. El crack que brilló en Barcelona y la selección brasileña publicó un video en sus redes sociales para informar que dio positivo en un test de Covid-19 que se realizó antes de participar de un evento en Belo Horizonte.
“Estoy en Belo Horizonte desde ayer (sábado) para participar de un evento pero me hice los exámenes y di positivo en Covid. Estoy bien, asintomático y en breve estaremos de nuevo juntos”, expresó el exfutbolista, de 40 años, en el video. Ronaldinho se quedó en Belo Horizonte para cumplir el correspondiente aislamiento.
Superados todos estos contratiempos, el presente de Ronaldinho es inmejorable con un resurgimiento vertiginoso. Se estima que en todo este tiempo desde que fue puesto en libertad no solo logró recuperar el millón de reales que pagó de fianza, sino que en ese lapso obtuvo unos 4 millones más, entre campañas y publicidad. En contrapartida con lo que se creía, la imagen de Dinho creció de gran manera.