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Francia, Reino Unido y Alemania advirtieron el sábado a Irán de que no empezara a trabajar en un combustible a base de uranio metálico para un reactor de investigación, diciendo que contravenía el acuerdo nuclear de 2015 y subrayando que no tenía ningún uso civil, pero sí serias implicaciones militares.
“Alentamos firmemente a Irán a que ponga fin a esta actividad y vuelva a cumplir plenamente sus compromisos en virtud del Plan de Acción Integral Conjunto (acuerdo nuclear de Irán) sin demora, si es serio en cuanto a la preservación de este acuerdo”, indicaron las tres potencias europeas en una declaración conjunta.
Reuters