Un incidente diplomático ocurrió en Europa después que un agricultor belga moviera accidentalmente la frontera con Francia, lo que hizo que su país de origen fuera unos 1.000 metros cuadrados más grande. Afortunadamente, las autoridades locales vieron el lado divertido.
Por CNN
Traducción libre de lapatilla.com
La frontera entre Bélgica y Francia se extiende por 620 kilómetros y los hitos de piedra que la definen han estado colocados pacíficamente durante más de 200 años.
Sin embargo, uno de las piedas, establecido en 1819, poco antes de que el Tratado de Kortrijk cerrara el trato, fue descubierto recientemente como fuera de lugar en 2,29 metros.
Se cree que un agricultor de la ciudad belga de Erquelinnes trasladó la molesta piedra de su tierra a un lugar más conveniente, sin anticipar el potencial de un alboroto internacional.
“Sabemos exactamente dónde estaba la piedra antes, justo al lado de un árbol”, dijo el martes a CNN David Lavaux, alcalde de Erquelinnes, Bélgica. “En 2019, durante el 200 aniversario, se geolocalizaron con mucha precisión. Las piedras se colocaron allí en 1819 después de la derrota de Napoleón, y el año está inscrito en ellas”.
Lavaux agregó: “Debe resolverse, estamos a punto de encontrar a la persona que movió la piedra, así podemos evitar cualquier problema. Aún tengo que verificar quién es el dueño de la tierra”.
El alcalde belga destacó que las autoridades locales de ambos lados de la frontera estaban deseosas de resolver la situación de forma rápida y amigable.
“Nos reímos de esto más que de cualquier otra cosa, no es muy grave”, comentó “Vamos a devolver la frontera a su lugar. ¡Nuestra intención no era hacer que Bélgica fuera más grande y Francia más pequeña!”