Preocupados ante la emergencia humanitaria que vive Venezuela, activistas y dirigentes de Voluntad Popular en Maracaibo realizaron una jornada social para brindar atención médica a los niños del Barrio Curarire de la parroquia Idelfonso Vásquez.
“La dictadura de Nicolás Maduro creó una emergencia humanitaria sin precedentes en el país, hoy vemos como cada día aumentan los casos de desnutrición, como no hay acceso a la salud, por eso hoy con un equipo de médicos y voluntarios realizamos esta jornada social para atender a los niños del oeste de Maracaibo”, afirmó Andrea Márquez, miembro de la Dirección Regional de Voluntad Popular.
La dirigente de la tolda naranja informó que más de 550 niños fueron atendidos en la jornada y recibieron una comida durante la actividad.
“El oeste es una de las zonas más desatendidas de Maracaibo, pero Voluntad Popular sigue en las calles tendiendo una mano amiga a los más necesitados. Conocemos lo difícil que es trasladarse hasta un centro de salud, por la falta de transporte público, además que en los hospitales no hay personal suficiente, muchos están en condiciones deplorables, no hay insumos ni medicamentos”, dijo.
Márquez aseguró que “rompe el alma” ver a las madres llorar porque no cuentan con los recursos económicos para alimentar a sus hijos.
“Estos niños la mayoría de las veces comen solo una vez al día, en algunos casos algún carbohidrato y no un plato con nutrientes y el régimen es el único responsable del hambre de todas las familias”, señaló.
La dirigente de Voluntad Popular informó que continuarán realizando estas jornadas sociales en diferentes parroquias de Maracaibo con el objetivo de ayudar a las familias en esta crisis humanitaria.
Nota de Prensa