Borges alertó que Maduro pretende engañar al mundo con supuesta reforma judicial

Borges alertó que Maduro pretende engañar al mundo con supuesta reforma judicial

Julio Borges. REUTERS/Guadalupe Pardo

 

 

El comisionado presidencial para Relaciones Exteriores, Julio Borges, alertó a la comunidad internacional sobre la maniobra de la dictadura de Nicolás Maduro con una “reforma” al sistema de justicia en Venezuela.





El máximo representante diplomático de Venezuela aseveró que la grave situación de derechos humanos de Venezuela no ha cambiado, como quedó evidenciado con la muerte del general Baduel en extrañas circunstancias, mientras se encontraba en custodia de la dictadura de Maduro.

“Hoy son más de 200 presos políticos, civiles y militares, que están en riesgo de muerte bajo el régimen de Maduro. Por ello el mundo debe presionar por su liberación y avanzar en el proceso de justicia de la CPI para lograr verdad y reparación para las víctimas”, enfatizó.

A continuación comunicado íntegro:

Por medio del presente queremos alertar a la comunidad internacional sobre una operación de la dictadura de Nicolás Maduro para dilatar el inicio de una investigación formal por parte de la Corte Penal Internacional (CPI) por los crímenes de Lesa Humanidad cometidos contra cientos de venezolanos, mediante la simulación de una reforma del sistema de justicia.

Dicha maniobra del régimen se da luego de los informes de la Fiscalía de la CPI y de la Misión de Determinación de Hechos del Consejo de DDHH de la ONU que subrayaron la inexistencia de un Poder Judicial independiente capaz de investigar las violaciones contra los ciudadanos, juzgar a los responsables y reparar a las víctimas. Es por ello que la dictadura, en su afán por esconder sus crímenes y retrasar la activación de la justicia universal por parte de la CPI, está simulando una especie de reforma del sistema de justicia nacional.

En el marco de este esfuerzo por confundir a la justicia universal, la dictadura de Maduro ha enmendado leyes, ha simulado estar desarrollando investigaciones independientes y ha procesado a funcionarios de bajo nivel dentro de la cadena de mando. Debemos alertar con firmeza que ninguno de estos procesos va a la yugular del problema de DDHH, el cual no es otro que la existencia de una dictadura que es una máquina de represión, tortura y muerte; y que ha socavado la institucionalidad democrática, desconociendo el principio de independencia de los poderes públicos. Un ejemplo palpable de que no se han hecho esfuerzos reales de cambio, es que la semana pasada murió en custodia de la dictadura el General Raúl Isaías Baduel, quien fuera en vida víctima de torturas, aislamiento, detención arbitraria, negación de la justicia y del derecho a la salud. Baduel, a quien se le negó la atención médica, falleció en circunstancias dudosas dentro de una de las cárceles de la dictadura, donde aún permanecen más de 200 presos políticos, entre ellos militares patriotas que han sido perseguidos por defender la Constitución.

La comunidad internacional, y especialmente la CPI, no debe confundirse ni reconocer avances del régimen por estas decisiones que no solo son insuficientes, sino que son un maquillaje de una grave situación de DDHH que empeora cada día. Por el contrario, la comunidad internacional debe presionar para que se desarrollen investigaciones independientes, se liberen a todos los presos políticos y, especialmente, se avance en el proceso de la CPI, ya que bajo esta dictadura no es concebible lograr justicia, verdad y reparación para las víctimas.

Centro de Comunicación Nacional