La familia de Amelia Baca, una mujer de 75 años que reside en Las Cruces, Nuevo México, llamó al número de emergencias 911 para pedir ayuda a las autoridades porque estaba teniendo una emergencia de salud mental.
El resultado de la interacción del 16 de abril entre el agente y Baca llevó a la familia a exigir que se presenten cargos de homicidio en contra del agente, afirmó en rueda de prensa el jueves el abogado que los representa, Sam Bregman.
Cuando el oficial llegó a la casa, lo primero que hizo fue pedirles a los familiares de Baca que se apartaran de la entrada. En ese momento, Albitar Inoh, la nieta de la mujer que necesitaba ayuda le pidió que tratara de no alterarla más. “Por favor, sea muy cuidadoso”, dijo.
A continuación, Baca se asomó desde el vestíbulo hacia la puerta abierta mientras sostenía dos cuchillos de cocina, uno en cada mano.
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