En El Vigía cunde el pánico entre los habitantes cada vez que llueve (Imágenes)

En El Vigía cunde el pánico entre los habitantes cada vez que llueve (Imágenes)

Ante la desidia y el abandono del régimen chavista que no ha tomado previsiones, cientos de familias de El Vigía durante las últimas semanas han padecido en carne propia las consecuencias de las lluvias. Desde hace más de 20 años, diferentes comunidades del municipio Alberto Adriani en el estado Mérida han sufrido la desatención y el olvido del chavismo.

Por Jesús Quintero





La maquinaria dispuesta por los organismos nacionales y regionales para la canalización de ríos y quebradas es insuficiente ante la cantidad de sedimento que se debe remover cada día para evitar el colapso de los afluentes y evitar que se generen tragedias de magnitud mayor.

Los sedimentos han acabado con miles de hectáreas productivas de diferentes rubros agrícolas en la zona Sur del Lago de Maracaibo, una zona caliente donde la temperatura supera los 28 grados cada día.

 

 

 

Las carreteras están llenas de huecos y caminos de tierra, donde es evidente que se necesita ayuda urgente. Existen sectores poblados y alejados, donde no llega la atención médica especializada, y muchos adultos y niños propensos a contraer enfermedades por la exposición a diferentes vectores que proliferan en la zona.

“Cuando llueve, no podemos dormir. Tenemos que salir, despertar a los niños en la madrugada y resguardarnos en las casas de los vecinos”, dijo una de las habitantes, quien añadió que cuando el río crece, la situación empeora, porque todos son afectados por estas crecidas”.

 

 

Se observó el crecimiento del caudal de los ríos Culegría y Guayabones, ubicados en las adyacencias del vertedero de Onía Culegría, donde son depositados los desechos sólidos de al menos cuatro municipios de los estados Zulia, Trujillo y Mérida.

Macario Segundo Ibarra, habitante del sector La Batea que está en alto riesgo, comentó que “necesitamos maquinaria que realice la canalización del río. Somos centenares de familias que nos vemos afectados, nuestros sembradíos. Aquí también hay productores”.

 

 

A pesar de los esfuerzos del gobierno municipal, es necesario la habilitación de maquinarias de gran escala para realizar la remoción y los trabajos de dragado.