EEUU sancionó a la junta militar de Birmania a dos años del golpe de Estado

EEUU sancionó a la junta militar de Birmania a dos años del golpe de Estado

Un soldado militar armado monta guardia frente a una puerta de la oficina del gobierno regional de Yangon, en Birmania. EFE / EPA / LYNN BO BO

 

 

Estados Unidos anunció este martes sanciones contra seis individuos conectados a la junta militar birmana, que el 1 de febrero cumple dos años en el poder desde el golpe de Estado.





John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, informó en una rueda de prensa de las sanciones y dijo que el Reino Unido, Australia y Canadá también tienen previsto anunciar o ya han anunciado acciones similares contra la junta militar birmana.

Según detalló el Departamento del Tesoro en un comunicado, tres de los individuos sancionados están ligados al sector energético de Birmania, que genera 1.000 millones de dólares en beneficios de manera anual y es la principal fuente de divisas de la junta militar.

En concreto, los sancionados son el ministro de Energía, Myo Myint Oo; el director gerente de la Myanmar Oil and Gas Enterprise (MOGE), una empresa estatal de gas y petróleo, llamado Aung Min; y su “número dos”, Than Min.

Otros sancionados son el jefe de la Fuerza Aérea de Birmania, Htun Aung, al que EE.UU. acusa de seguir lanzando ataques contra civiles; y Hla Swe, un exmilitar que supuestamente se dedica a amenazar a miembros de las minorías del país en una publicación afín a la junta.

La última sancionada es Htoo Htwe Tay Za, hija del empresario multimillonario Tay Za y al que Washington considera un aliado de la junta militar birmana.

Como consecuencia de las designaciones, quedan congelados los activos que estas personas y entidades puedan tener bajo jurisdicción estadounidense y se les prohíbe hacer transacciones financieras con ciudadanos de EE.UU.

Estados Unidos y sus aliados ya impusieron duras sanciones a la junta militar cuando se produjo el golpe.

Esa asonada militar ha sumido al país en una profunda crisis política, social y económica y ha abierto una espiral de violencia con nuevas milicias civiles que han exacerbado la guerra de guerrillas que vive el país desde hace décadas.

EFE