El encarcelado líder opositor ruso, Alexéi Navalny, calificó de “injusta, ilegal y fascista” la sentencia de 25 años de cárcel dictada este lunes contra el opositor y periodista Vladímir Kara-Murzá.
“Estoy profundamente indignado por la sentencia de Vladímir Kara-Murza. Ha recibido 25 años. Califico el veredicto como ilegal, injusto y simplemente fascista”, dijo Navalny, citado por su equipo en Telegram.
Navalny, condenado en 2022 a nueve años de cárcel por estafa de gran cuantía, aseguró que Kara-Murzá también está siendo perseguido por razones políticas.
“Quier expresar mi apoyo a su familia y me preocupo mucho por su salud”, señaló el opositor.
Según Navalny, la sentencia de 25 años es una especie de “venganza” de la Justicia rusa por los dos intentos de envenenamiento que Kara-Murzá sobrevivió en 2015 y 2017.
El Tribunal Urbano de Moscú condenó hoy al opositor a 25 años de prisión -tal como pedía la Fiscalía- por un delito de alta traición, difusión de información “falsa” sobre la actuación del Ejército ruso en Ucrania y cooperación con una ONG declarada indeseable por la Justicia rusa.
Además, le impuso una multa de 400.000 rublos (cerca de 5.000 dólares) y le prohibió ejercer el periodismo durante siete años.
Los abogados de Kara-Murzá -que llevaba un año y medio en prisión preventiva- han anunciado que recurrirán la sentencia.
Tras conocerse la sentencia, el centro de derechos Memorial, ilegalizado en Rusia, reconoció a Kara-Murzá como un preso político.
El propio opositor dijo la semana pasada que no se arrepiente “de nada” y que ama a Rusia.
“Estoy en la cárcel por mi postura política, por estar en contra de la guerra en Ucrania, por mi larga lucha contra la dictadura de (el presidente ruso, Vladímir) Putin”, afirmó y subrayó que se siente orgulloso de que le introdujera en la política el opositor Borís Nemtsov, asesinado en 2015 cerca del Kremlin.
EFE