Elsa Muro: Diosdado el Coyote detrás de la Correcaminos

Elsa Muro: Diosdado el Coyote detrás de la Correcaminos

No hay signo mas evidente de una inminente y contundente derrota electoral que la desesperación. Una sensación de grave inquietud, amargada actitud hacia el chavista exhausto, posturas de insatisfacción personal, inocultable demerito hacia el candidato, que ha dilapidado la fortuna de haber sido herederos sin esfuerzos, del eterno Comandante, que se volvió efímero, y en el pasado se convirtió en un vengador, devenido en un estafador de ilusiones.

No dan crédito el Coyote al desprecio que siente la gente hacia ellos, la insinceridad de su sumisión, pues ya no es fervor sino fundado terror.





La falta de creatividad, la soledad lacerante que siente cuando piensa en el pasado, el poder alcanzado por la fuerza de una fenómeno electoral ajeno, y no por merecimiento ni liderazgo propio, las calles y avenidas repletas de manera espontánea y ayuda con transportación pagada con partidas secreta, dinero públicos, coimas concertadas y otros aportes de los validados del régimen.

La amargura del coyote nos encara a una campaña tan sosa como el candidato, fastidiosa como su acompañante, sin mensajes, promesas desgastadas, embustes que laceran, que a nadie embaucan como el pasado.

El COMANDO COYOTE lo que hace es perseguir a María Corina, a buscar desesperadamente como marido en busca del amante de la esposa, cuales van a ser los pasos que marcan la actuación triunfante de la MC, Edmundo y todo el mundo, pues la candidata es Venezuela, el comando son los miles de venezolanos transformados en Correcaminos, que dejan a Diosdado como el Coyote en el desierto: desecho, estropeado, frustrado e implosionado, cogiendo fuerza para tratar de alcanza al correcaminos.

Una estribillo que el Coyote repite mil veces al día, recordando su infancia frente al televisor: “Si estando en la carretera oyes un beep beep, ten la seguridad de que se trata de mi, y se tratas de seguirme te va anochecer…, y si sigues con tus tontas trampas de te vas a malograr beep beep“.

Elsa Muro